2009 / BÚSQUEDA PLÁSTICA
Ahora tengo interés en que mi pintura no canse. Que siempre se pueda ver como por primera vez. Que lleve al observador a un estado de no saber frente a lo que se le presenta.
Me interesa una pintura que sea como contemplar un árbol antes de saber que es árbol, o un mar, antes de saber nombrarlo.
Una pintura que tenga la capacidad de lograr que el contemplador y lo contemplado se vuelvan una sola experiencia. Donde no haya conceptos, referencias o alegorías.
En su ejecución no me interesa la estridencia, la novedad o el brillo. Sí, el juego plástico que desaliente la tentación de la mirada por descubrir algo reconocible, porque ello nos desplazaría instantáneamente de la unidad de la experiencia creativa a su periferia.
No pretendo una pintura que sofoque, o aplaque, la rebelión de todos los que, como yo, consideramos que, en el plano externo, hay luchas que inexorablemente debemos dar, pero si pretendo que, en el plano interno, contribuya a que toda contienda sea superada por la unidad indescriptible de la experiencia misma.
Miguel Lo Coco
6 de marzo de 2009